viernes, 15 de noviembre de 2013

Quien maneja nuestra vida...

Querid@s soñador@s: 


Hoy me voy a detener por un instante para hablar del tiempo. En realidad nadie parece haberse dado cuenta de lo importante que es. Parece ser la cosa mas insignificante que pasa desapercibida. Todo el mundo habla del amor, de la amistad, del desengaño… pero nadie se ha detenido a pensar ¿Qué es el tiempo?.
Yo, en esos momentos reflexivos del autobús viniendo o yendo a la uni pienso demasiado en ello. Pues es el tiempo quien, sin darnos cuenta, nos lleva. El hace y deshace lo que quiera sin importarle lo que nosotros pensemos de ello. Le da igual que te guste o que no, le da igual lo que quieras hacer o lo que no, por mucho que intentes escapar de él, tenlo claro… Es imposible.
Muchas veces juega en nuestra contra. Cuando queremos que las horas se hagan extensas, pasan a la velocidad de una gota de lluvia cayendo de un tejado. Y cuando queremos que los segundos sean mas cortos, no acaban de pasar.  Continúan poco a poco. Poco a poco. Y nunca pasan. Miras al reloj. Las horas siguen ahí muertas. No pasan. Nunca pasan.

Vives la vida esperando a que llegue ese  momento que tanto esperas. Con ansias quieres que esos días pasen lo mas rápido posible, solo tienes una cosa en mente ¡Que llegue mi momento!! Y cuando llega, te das cuenta que es el final de la historia y que de ahí en adelante ya no hay nada mas. Es el final, final. No hay mas. Ni “vivieron felices y comieron perdices” ni un “to be contiued”. NADA!!

El tiempo se escabulle entre nuestros dedos demasiado fácil. Y por mucho que nos esforcemos por agarrarlo, nos engaña y acaba desapareciendo. Es un alma libre, que solo sabe vivir en soledad, a la sombra de todo lo demás. El no quiere hacerse notar. No quiere que sepamos que es importante, porque ¿que queda del amor si no nos queda tiempo? ¿Qué hay de la felicidad sin tiempo para disfrutarla? 
El tiempo es el quid de todo. Sin tiempo no seríamos nada. No existiríamos. Sin embargo tenemos que volvernos ciegos. Hacer como si no supiéramos de él. Nunca os he hablado de ello. 
Volvamos de nuevo a cantar, escribir o hablar sobre el amor, la amistad, el desengaño… 
Seamos de nuevo marionetas sin voto de decisión. Seamos una vela sin timón. Que nos guíe el viento. Que nos guíe el tiempo. Hagámonos los tontos, y sigamos haciendo creer que seguimos pensando que manejamos nuestra vida como queremos. Total, hará lo que le de la gana. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario